La bici como alternativa al transporte en la ciudad de Granada: Bici y la educación vial

CONSEJOS PARA CIRCULAR POR LA CIUDAD

Usar siempre casco

El casco absorbe gran parte de los impactos en la cabeza. Conviene aguantar con él incluso en los días de calor.
No es cierto que con el casco aumenta la posibilidad de que los hombres se queden calvos. Y aunque fuera cierto, es mejor quedarse calvo que exponerse a partirse la cabeza contra el asfalto.

Procura salir en grupo

Tiene muchas ventajas salir en grupo.

La primera es que ante cualquier accidente o avería os podéis ayudar unos a otros.
La segunda es que el conductor suele ver mejor y respetar más a los grupos de ciclistas que a ciclistas sueltos.
Y la tercera es que, ante cualquier delito por parte de algún conductor siempre habrá testigos.
Si se circula en grupo es muy importante que quien lo encabece avise al resto de posibles obstáculos como piedras o cristales, porque los ciclistas que circulan detrás pueden no percatarse de ellos, con el consiguiente accidente.
Por último cabe indicar que por muy numeroso que sea el grupo que formemos no se debe "tomar" la carretera aprovechando el respaldo del grupo. Se debe circular en fila india o en fila de a dos.

Elige carreteras con poco tráfico y arcén ancho

Disminuye el peligro de atropello. No obstante, conviene matizar que no es muy recomendable circular por carreteras que estén totalmente abandonadas, ya que si sufres en ellas algún accidente, nadie te podrá auxiliar.

En la realidad, es muy difícil que una carretera tenga a la vez poco tráfico y buen arcén. Entonces, quizá es mejor decantarse por carreteras con poco tráfico aunque carezcan de arcén, ya que suele tratarse de carreteras en las que los automovilistas no pueden alcanzar elevadas velocidades.

Circulación en paralelo

Aquí hay división de opiniones. Algunos piensan que es mejor ir en fila india para estar menos expuesto al contacto de los vehículos que te adelantan. Otros opinan que, circulando en paralelo, los ciclistas obligan al conductor a frenar y a no adelantar hasta que no venga nadie por el sentido contrario. En cualquier caso, circula como mejor te sientas.

Si circulas en fila india, ten cuidado al dar los relevos.

Antes de dar un relevo, asegúrate de que no se acerca ningún vehículo por detrás, porque podría ocurrir lo que en el dibujo:

Los dos rectangulitos rojos representan a un ciclista que releva a otro. El rectángulo amarillo es ese conductor al que tanto le molesta que haya ciclistas en la carretera, y que no está dispuesto a frenar ni a pisar la raya continua para adelantarles. Si el relevo se produce cuando el conductor está demasiado cerca de los ciclistas, es muy probable que se lleve por delante al que releva. La situación se agrava si el arcén es mínimo o inexistente.

Respeta el código de la circulación

Recuerda que eres un vehículo más, y que por tu bien y por el de los demás debes respetar las señales, los semáforos, etc. Se ha dado algún caso de ciclistas multados por saltarse un semáforo de peatones.

No te la juegues en los descensos

Cuanto mayor sea la velocidad, mayor es la posibilidad de accidente y más fuerte el impacto. Es bastante irresponsable el lanzarse a tumba abierta para batir algún record o alcanzar una determinada velocidad máxima. Por muy bien que te conozcas la carretera, puede haber arena o gravilla en el lugar más inesperado.

Especial peligro existe en las curvas sin visibilidad, en las que si invades el carril contrario para tomarla más rápido te puedes encontrar con una desagradable sorpresa en forma de vehículo o incluso de animal. ¡No te dejes guiar por el oído! Descendiendo el aire te impide oír la presencia de los vehículos.

Si te encuentras ante una curva con visibilidad y quieres trazarla, hecha antes una mirada general a toda la curva para asegurarte de que no se acerca ningún automóvil en el sentido contrario. Sólo en ese caso puedes permitirte tomar la curva a tus anchas. Aún así, extrema las precauciones.

Señaliza bien todas las maniobras que vayas a realizar

Conviene que señalices con los brazos todos tus movimientos, especialmente en los giros a la izquierda y en las rotondas.

¡Ojo con estas dos situaciones!

El ciclista (línea roja) quiere coger la carretera de la izquierda, para lo cuál tiene un carril de espera. Cuando está en A se percata de que por detrás se acerca un automóvil.

No debes girar hasta que no pase, y estés seguro de que no venga ninguno más.

Parece lógico, pero en la práctica se han visto muchos accidentes de este tipo con consecuencias fatales.

Una vez estés en B, donde suele haber un STOP pintado en el suelo, la situación es más fácil, porque los vehículos vienen de frente y no hay que girarse para verlos.

El ciclista circula por una autovía y se encuentra con un carril de deceleración que no va a tomar. Hay que tener en cuenta que si un conductor va a meterse por este carril lo hará a unos 100 km/h. y posiblemente no se percate de la presencia del ciclista.
La solución es circular por la derecha de este carril, y antes de llegar al final, asegurarse de que no se acerca ningún vehículo por detrás y regresar al arcén, señalizando claramente la maniobra.

Cualquier movimiento de los vehículos cercanos a ti es posible:

Debes tener en cuenta algunas cosas como que no siempre te van a ceder el paso, que en cualquier vehículo aparcado se puede abrir la puerta del conductor o puede arrancar de repente, etc.
Aquí por experiencias propias considero que las situaciones más comprometidas son dos:

1. En las rotondas:

Si vas a girar por el primer giro a la derecha, no hay problema. El problema está cuando vas a seguir recto, girar a la izquierda o cambiar de sentido.
El ciclista (flecha roja) viene desde A, y quiere girar a la izquierda, por D. Supongamos que unos segundos más tarde un automóvil (línea azul) viene desde ese mismo punto para continuar recto, por C. Ocurriría que se encuentra al ciclista de perfil.

Hay algunos conductores que, si tienen que tomar esa salida, se empeñan en que tienen que pasar antes que el ciclista, el cuál si continúa su camino, se encontrará al automóvil en su costado izquierdo.
El ciclista debe estar muy atento ante esta situación, y en este caso, aunque lleve preferencia, lo mejor que puede hacer es frenar, porque en caso de choque va a llevar las de perder.
Otra "estrategia defensiva" que puede tomar el ciclista es la siguiente: justo antes de llegar al comienzo de la flecha roja, invadir parte del carril derecho mientras señaliza la maniobra para avisar mejor a los conductores del giro a la izquierda.

2. Coches aparcados:

Existe grave peligro con las puertas, ya que generalmente no se suele mirar si viene alguien detrás antes de abrirlas. Si circulas por una calle donde hay coches aparcados, mantén una distancia prudencial, y extrema tus precauciones si en algún coche ves una cara en el retrovisor izquierdo o una cabeza en el asiento del conductor.

Respecto al tema de que arranquen de golpe e invadan tu carril existe menos peligro, porque los conductores antes de incorporarse a la circulación sí suelen mirar por el retrovisor a ver si viene alguien.

No circules detrás de ningún vehículo lento
La ventaja sería que te arropa del aire, y te evita esfuerzo. Pero existe el riesgo de que frene de golpe y no te dé tiempo a reaccionar, o que haya obstáculos en el suelo y no los puedas ver.

Evita la climatología adversa

El viento y la lluvia son malos compañeros e incrementan el peligro de caída. Además en días muy nublados puedes no ser visto por los conductores.

Ve documentado

Es importante por si te ocurre algún accidente y porque los agentes de seguridad te lo pueden pedir.

Además conviene que junto con tus datos guardes un papel con un teléfono al que llamar y con tu grupo sanguíneo.

Cuidado con los animales

Especialmente con los perros, ya que algunos no dudan en cruzarse en tu camino o en lanzarse a por ti.
Tampoco te descuides si te encuentras alguna vaca o caballo, aunque éstos suelen ser más inofensivos y en teoría te tienen miedo.
Nunca provoques ni persigas a ningún animal.
Finalmente, ojo con los rebaños de ovejas. Nunca te metas dentro del rebaño, porque siempre hay un perro que lo custodia, y puede atacarte si siente que las ovejas están amenazadas.

Asegúrate de que los peatones se han percatado de tu presencia

Un peatón que no se ha dado cuenta de que te acercas es imprevisible, se puede cruzar en el momento más inoportuno provocando graves consecuencias tanto para él como para ti. Con frenar suavemente y decir "¡Cuidado!" suele bastar.

Extrema las precauciones cuando oigas un camión detrás de ti

Un camión es más ancho que un automóvil y tiene menos posibilidades para frenar. Por tanto va a ser más probable que pase cerca de ti hasta el punto de que el aire te pueda tirar a la cuneta.
Las precauciones que debes tomar cuando oigas que se acerca un camión son las siguientes:

Mantén la calma.
Échate a la derecha de tu arcén todo lo que puedas.
No hagas movimientos bruscos.
Agárrate fuerte al manillar para mantener la trayectoria cuando te vaya a dar el golpe de viento.

Vigila el estado de tu bicicleta antes de cada salida

Conviene revisarla periódicamente, ya que muchas averías han sido causa de accidentes. Son muchos los ciclistas que no cuidan este tema. Ejemplos hay muchos:

Tener la cadena oxidada: se te puede partir o salir justo cuando vas pedaleando de pie.
Llevar flojos los frenos: puedes tomar una curva sin haberte percatado de la avería, y salirte de la carretera.
No tener bien ajustada la rueda delantera: en un bache se te puede salir.
Llevar poco inflada alguna rueda: puedes derrapar en alguna curva.
Llevar flojo el manillar: puede no responder en alguna curva.

Lleva las herramientas adecuadas

Llevando un kit básico de herramientas reduces al mínimo el riesgo de quedarte tirado en mitad de la carretera por una avería. Las herramientas más frecuentes son: dos cámaras, desmontadores de cubierta, bomba de inflado, algunas llaves fijas y allen, y opcionalmente un tronchacadenas, llave inglesa y llave para radios.
Aún llevando todas estas herramientas es recomendable llevar teléfono móvil. Apagado, por supuesto.

No sueltes las manos del manillar

Como mucho se puede soltar una mano para coger comida o agua. Pero si lo que queremos coger está inaccesible con una mano, es mejor pararse. Y por supuesto, no festejes tus hazañas levantando las dos manos.

No tomes la carretera como una pista de competición
Te recuerdo que los ciclistas que salen en la televisión tienen las carreteras cortadas al tráfico, mientras que por donde tú circulas puede aparecer un coche en cualquier momento. De modo que no conviene realizar sprints en paralelo o invadir el sentido contrario para trazar una curva en un descenso.

No lleves walkman, mp3 o mp4

Te aísla del exterior y no te das cuenta de que, por ejemplo, tienes un coche detrás. Además el ir en bicicleta es lo suficientemente divertido como para no necesitar música. Y si llevas teléfono móvil, conviene que lo lleves apagado.

Trata de evitar la primera hora de la mañana y la última de la tarde

A estas horas los conductores tienen el sol muy de cara, y les dificulta la visión, especialmente de un vehículo tan pequeño como una bicicleta. Por experiencia propia como conductor, afirmo que al ciclista no se le ve hasta que no se está casi encima de él.

Igualmente trata de evitar salir por la noche
Las luces y los reflectantes que se incorporan a las bicicletas no son suficientes para ser vistos con claridad por los conductores. Además, por la noche, un conductor lo último que se espera encontrar es un ciclista.

En ciudad, circula por el centro del carril
Aunque en carretera debes ir pegado a la derecha, en ciudad conviene que circules por el centro del carril derecho para evitar que te adelanten por tu propio carril. Si vas pegado a la derecha, te adelantarán por el carril derecho sin dejarte casi espacio; mientras que si vas por el centro del carril obligarás a los conductores a que te adelanten por otro carril, o que, cuanto menos te dejen espacio a tu derecha.

Sé visible

Procura llevar ropa de colores que se vean. En general, evita los colores oscuros, especialmente el verde, el gris, el marrón y el negro. Los colores que mejor se ven son el amarillo, el naranja, el rojo, y colores fluorescentes. Cualquier combinación de colores es igualmente buena siempre que destaque sobre el paisaje.

Sé solidario con el resto de ciclistas
Si ves a algún ciclista accidentado o con alguna avería, no dudes en ofrecerle tu ayuda. Mañana puedes ser tú quien lo necesite. No debe servir la excusa de "no me paro porque me corta el ritmo".

No sobrepases los límites de tu cuerpo
No intentes imitar a los ciclistas profesionales, porque ellos tienen unas cualidades que no las tiene casi nadie. El querer sobrepasar los límites del cuerpo sólo puede traer consecuencias negativas, como sobrecargas, tirones, calambres o incluso la muerte.

SEGURIDAD VIAL PARA BICICLETAS

Siempre trate de andar en bicicleta en una forma predecible y con control completo para que los demás sepan qué esperar de usted. En un número considerable de choques, los automovilistas reportan que no vieron al ciclista a tiempo para evitar el choque o que no lo vieron para nada.

Las bicicletas deben viajar a la derecha del camino. Trate de ir lo más cerca posible de la orilla derecha del camino. Estos son algunos consejos que pueden proteger a cualquier ciclista:

1. Sepa y obedezca los reglamentos, letreros, señales y líneas de señalización.
2. Escoja una ruta con pocos automóviles, baja circulación y cruces fáciles.
3. Viaje en forma defensiva. Esté atento a lo que hacen los demás.
4. Siempre pare y vea de izquierda a derecha a izquierda antes de entrar al camino.
5. Viaje en el sentido del tránsito, no en sentido contrario. Viaje en una fila india.
6. No lleve pasajeros ni artículos que interfieran con su control.
7. Nunca se "enganche" a un vehículo automotor.
8. Cuando cambie de carril, siempre vea hacia atrás primero y deje pasar al tránsito.
9. En las esquinas de mucho movimiento, camine con la bicicleta.
10. Use señales manuales para indicarles a los conductores lo que piensa hacer.
11. Cuando se acerque a superficies peligrosas, como rejillas u hojas húmedas, reduzca la velocidad, evite dar vueltas rápidas y paradas bruscas, y acelere o frene con más lentitud.
12. Recuerde: Es ilegal andar en bicicleta cuando se está bajo la influencia de bebidas alcohólicas o drogas.

Equipo de protección para bicicletas

Como regla general, se recomiendan todos los tipos de equipo que faciliten que los automovilistas lo vean y que no limiten sus movimientos. Por ejemplo:

1. Use un casco

2. Ponga luces y reflectores en su bicicleta. Todas las bicicletas deben tener, como mínimo, un reflector frontal de color blanco, un reflector posterior rojo, reflectores de dos lados en las ruedas y un faro. Mantenga los reflectores limpios y reemplace los que se rompan.

3. Use ropa de color brillante o fluorescente durante el día (la ropa de colores claros ayuda a los conductores a ver más fácilmente a los ciclistas) y ropa reflectante en la noche.

4. Ayuda tener un espejo retrovisor ya que permite al ciclista estar al pendiente de lo que ocurre atrás.

5. Se debe poner una bandera brillante durante el día (lo más alto posible) en la parte de atrás de las bicicletas de los niños para que los puedan ver fácilmente los demás conductores.

6. Un claxón o un timbre avisa a los peatones y a otros conductores que se acerca un ciclista.

7. Evite usar faldas largas y pantalones acampanados. Sujete los pantalones a las piernas con clips de seguridad o ligas para las piernas.

8. Una canastilla o un portabultos atrás ayuda en la cuestión de seguridad al ofrecer una forma de transportar paquetes y de dejar libres las manos del ciclista.

9. Un niño de cuatro años o menor, o que pese 40 libras o menos, debe viajar en un asiento que sujete al menor en el sitio y que lo proteja de las partes en movimiento. El niño también debe usar un casco aprobado.

Cómo evitar el robo de bicicletas

Las bicicletas son bienes que valen la pena proteger, no importa si es su vieja bicicleta de diez velocidades o la nueva bici de montaña de su hijo. Estas precauciones básicas pueden ahorrarle muchas molestias a la larga:

1. Ponga siempre candado a su bici cuando tenga que dejarla sin vigilancia.

2. Compre el mejor sistema de cerradura que pueda. Ninguno será tan caro como el costo de una bicicleta nueva.

3. Escoja un sistema de cerradura que no se pueda cortar fácilmente, como un candado en forma de U o un candado muy resistente con cable de alambre fuerte.

4. Siempre trate de asegurar el cuadro de la bicicleta y las dos ruedas a un objeto fijo, como un poste o una cerca. No basta con sujetar sólo la rueda delantera porque entonces se pueden robar fácilmente el resto de la bicicleta.

5. Proteja su bici anotando su número de serie. Esto puede ayudarle a recuperarla si se la roban.

6. Registre su bicicleta con su departamento local de policía. De esa manera no sólo aumentará las posibilidades de recuperarla si se la roban sino que la etiqueta de licencia a la vista puede desalentar a un posible ladrón.

Los niños y las bicicletas

Las bicicletas son los primeros vehículos de sus hijos y usted es el instructor de educación vial.
No cometa el error de escoger una bicicleta que sea demasiado grande para su hijo, con la idea de que con el tiempo le quedará a la medida. Aprender a andar en una bicicleta más grande es muy difícil y aumenta el riesgo de caerse y chocar.
Quizá usted piense que su hijo no corre riesgos si se pasea en el vecindario. Piénselo de nuevo. Los choques más graves de bicicletas ocurren en calles tranquilas de los vecindarios, especialmente en el caso de los niños pequeños.
Los niños menores de nueve años no deben andar con sus bicicletas en la calle y siempre se les debe supervisar. Las aceras pueden ser peligrosas. Es posible que los conductores que entran y salen de los accesos de automóviles no vean a los niños que anden en bicicletas.

Ciclismo en días lluviosos

El riesgo de caerse aumenta cuando el agua cubre el camino. Se requiere tomar precauciones cuando llueve. Andar en bicicleta es más peligroso cuando empieza a llover debido a que el aceite en las carreteras se combina con la tierra y crean una superficie resbalosa. El pavimento húmedo reduce la tracción. Si la lluvia es lo suficientemente fuerte, la rueda delantera puede perder el contacto con el agua, ocasionando un proceso que se llama hidroplaneo y que hace que se pierda el control de los frenos y de la dirección.

Si tiene que viajar en la lluvia:

1. Revise la superficie de rodamiento de las ruedas. Las ruedas desgastadas pueden hacerle perder el control cuando llueve.

2. Viaje siguiendo las marcas de los vehículos automotores enfrente de usted, de esa manera tendrá una superficie más seca y mejor tracción.

3. Trate de evitar ir por superficies que son especialmente resbalosas cuando están húmedas--las bocas de alcantarillas, las líneas pintadas y el centro con grasa de los carriles.

4. Algunos tipos de zapatos de freno son mejores que otros cuando llueve. Consulte con su concesionario de bicicletas. Cuando llueve, los frenos de zapatas, que ahora son parte del equipo estándar de la mayoría de las bicicletas, pueden perder la mayor parte de su potencia para frenar.

5. La lluvia reduce la visibilidad de los conductores. Siempre es buena idea usar ropa de colores brillantes para ser más visible cuando se va en bicicleta, pero es de particular importancia cuando llueve.

Señales de tráfico